Supuesto el caso de dos vehículos circulando paralelamente y en direcciones opuestas,entre los cuales se produce una
colisión frontal excentrica impactando ambos en sus frentes delanteros izquierdos, de manera tal que las direcciones de los centros de gravedad de ambos se encuentren paralelas y separadas en distancia por un metro.
Tal el caso es razonable asumir que ambos vehículos tenderán a rotar sobre su eje central a la vez que se desplazan longitudinalmente. Generando lo que se conoce en la dialéctica accidentológica como un movimiento roto-traslatorio.
Basándose en uno de los principios básicos de la física mecánica, la cual indica que la cantidad total de energía en un sistema cerrado permanece constante. Mediante este tipo de análisis es posible explicar parte de la energía cinética que poseían ambos vehículos en el instante previo al siniestro.
Una vez conocida la energía cinética transferida, es posible determinar la velocidad que llevaban los vehículos con anterioridad a la colisión.
Ahora bien, en un caso particular podría darse la situación en la cual ambos vehículos colisionen de esa manera, dejando uno al otro una impronta longitudinal que se inicia en el frente del vehículo, recorre todo su lateral izquierdo llegando hasta la parte trasera izquierda de dicho vehículo.
Este se trata de un caso en el cual colisionan dos vehículos de frente y con posterioridad al hecho no se produce un movimiento roto-traslatorio esperado. Los motivos de ello podrían ser varios, como por ejemplo las diferencias de porte entre los vehículos, que la colisión no sea totalmente paralela, sino que exista un ángulo entre ambos vehículos al momento de producirse la misma, etc.
Al no existir un movimiento roto-traslatorio, la cantidad de energía cinética disipada por el vehículo con posterioridad a la colisión es consecuentemente menor.
